Ulises Dávila hace una declaración severa sobre su problema en Australia
Ulises Dávila tenía grandes expectativas de ser una de las promesas mexicanas tras la Copa del Mundo Sub-20 en 2011; sin embargo, su carrera no tuvo el despegue que se esperaba y ahora atraviesa uno de los momentos más complicados en su trayectoria.
El futbolista mexicano se declaró culpable de encabezar un amaño de apuestas en Australia. La operación ilegal consistía en provocar amonestaciones intencionales durante partidos específicos para obtener algunas ganancias económicas a través de apuestas.
Una investigación policiaca llegó a la conclusión de que el partido en donde comenzaron estas prácticas fue el 9 de diciembre de 2023, cuando Macarthur FC, equipo donde militaba el mexicano, jugó ante el Sídney FC. Varios jugadores recibieron amonestaciones deliberadas en medio de una trifulca provocada por ellos mismos. Las apuestas habían sido colocadas para que el equipo recibiera al menos cuatro tarjetas amarillas durante el partido.
De acuerdo con algunos reportes, Dávila obtuvo ganancias de 200 mil dólares estadounidenses solo por ese partido. Los futbolistas Lewis y Baccus reconocieron su participación y señalaron al mexicano como “no solo capitán del equipo, sino del esquema”.
En junio de 2024, Macarthur FC rescindió el contrato de los tres involucrados y la liga de Australia los suspendió de por vida. Actualmente, Dávila se encuentra libre bajo fianza, con la obligación de presentarse semanalmente en la comisaría de Maroubra. Su sentencia final está programada para el 19 de diciembre, mientras que permanece suspendido de por vida del balompié australiano.
