Ante un nuevo trago amargo para la afición culé, me atrevó a asegurar que este fue el derrumbe del Futbol Club Barcelona.
De nueva cuenta el Bayern Munich fue el antagonista, el verdugo, el juez que sentenció una nueva mancha en el Barcelona. Los dejaron sin avanzar a Octavos de Champions, algo que no ocurría desde 2001.
Las remontadas sufridas en Anfield y Roma, tener una racha de cinco clásicos sin poder ganarle al Real Madrid, el 8-2 contra el Bayern, la salida de Messi, todo eso ha ocurrido en los últimos cinco años en el club azulgrana.
Este Barcelona se encuentra a años luz del que consiguió el sextete, ese equipo que parecía imparable y daba temor enfrentarlo en cualquier competencia.
Johan Cruyff, Bianquetti, Maradona, Luis Enrique, Guardiola, Rivaldo, Ronaldinho, Xavi, Iniesta, Puyol, y Messi, todos referentes del club azulgrana y que ahora ven la humillación en la que se encuentra el Barcelona.
Además, el club culé ha tenido una pésima administración en cuanto a compra/venta de jugadores se refiere:
- Dejaron ir a Arthur, futbolista joven, brasileño y recibieron a Pjanic, jugador con mayor edad y que actualmente ya salió del club. El monto fue de 72 millones de euros.
- 105 millones por Dembélé, el futbolista francés que se ha lesionado en más de cinco ocasiones durante su estancia en el Barcelona y no ha rendido lo que se esperaba de él.
- El Barça también tuvo perdidas con otro futbolista francés: Antoine Griezmann. Su fichaje fue por 120 millones de euros y tras dos años, regresó al Atlético de Madrid a préstamo y recibirá una menor cantidad de la que pagaron por él.
Y por si fuera poco, dejaron ir al jugador más importante en la historia del club para intentar tapar otra mancha: sus problemas financieros. Todo apuntaba para ver a Lionel Messi retirarse con la camiseta del Barcelona, y ahora se encuentra en París con Neymar y Mbappé.
El Futbol Club Barcelona necesita despertar de esta pesadilla, comenzar a preparar su regreso y volver a darle alegrías a su afición, “aunque sea”, en la Europa League.
