Toluca está herido de muerte, es increíble que un equipo sea tan gitano de un partido a otro, el juego del pasado sábado nos mostró que América no era como lo pintaban para ser campeones, mientras que los Diablos no estaban para mostrar un buen futbol.
Guillermo Almada demostró tener un ojo clínico en la dirección técnica, mostrando que primero analiza al rival y luego lo ataca al rival para dejarlo casi inerte, lo de Toluca fue sumamente inaudito, muchas cosas que no cuadran al momento de analizar esta goleada.
Los dirigidos por Nacho Ambriz no quisieron ser ofensivos, no quisieron mantener el resultado positivo antes de ir a defender el resultado. Los Diablos no hicieron más que evidenciar el pobre nivel futbolístico que tienen.
Así es, y se marchó se barco le llamó dejarlo todo en el cotejo ante las Aguilas, se exprimieron al máximo para eliminar al Ame, pero de esto poco o nada sirvió porque podrá quedar como uno de los peores subcampeones de la historia.
Harían bien y se vieran como horrores y dignidad si no se presentan al juego del domingo, nada es imposible, pero da lo mismo perder por uno que por 8, Toluca tiene de dos o perder por una goleada de escandalo en la historia de las finales o no presentarse y pagar la multa por perder por default. Ese es el dilema.
