Los Pumas de la UNAM han tenido un desempeño satisfactorio para sus aspiraciones, aunque no ha sido la misma dinámica durante todo el torneo.
Luego de comenzar la temporada con triunfos esperanzadores frente a Toluca y Querétaro por vía de goleada, los resultados comenzaron a ser polarizados tanto en Liga como en Concacaf Liga Campeones, hilando empates y derrotas que comenzaron a amenazar la causa de Andrés Lillini.
Esto ha cambiado en las últimas semanas, pues el equipo azul y oro encontró su mejor versión en las dos competiciones, las cuales, según los mismos jugadores y el cuerpo técnico, van a competir hasta la última instancia.
Pumas está teniendo un mes de abril definitorio para sus aspiraciones, pues no ha perdido en los cinco partidos que ha disputado y se encuentra como finalista en la Concacaf Liga Campeones y se posiciona en séptimo lugar en la tabla general, siendo su más reciente éxito el triunfo frente a los Rayados de Monterrey en la cancha de Ciudad Universitaria.
El mejor momento para “prenderse” fue precisamente este, pues a falta de tres partidos en el calendario de los Pumas en Liga y la aproximada final de Concachampions, la motivación debe de ser uno de los factores imprescindibles en el equipo.
