Ante la misma incertidumbre de que puedan ser cancelados los juegos olímpicos, los organizadores estarán con la firme convicción de que se llevarán a cabo, es por eso que se están implementando muchas medidas de seguridad para que se puedan llevar a cabo de buena forma y sobre todo con medidas sanitarias.
La nueva normalidad estará siendo sumamente diferente para los juegos olímpicos, primeramente, se rumora que serán los juegos olímpicos silenciosos, que quiere decir esto, que los asistentes no podrán estar es que no podrían cantar los asistentes, no podrán hacer festejos dentro de las instalaciones, estrictamente silencio en todos lados.
Esto será para que puedan controlar a los atletas, al publico que pueda asistir a los juegos y poder evitar algún contagio, pero eso no es todo lo que se pretende hacer, se dio a conocer un libro con medidas precautorias para los asistentes y atletas, con medidas que se deberán acatar para que se puedan llevar a cabo los juegos.
Dicho libro dice las medidas que se deben de tomar donde recomienda a los asistentes que en lugar de cantar aplaudan cuando se pueda en el evento en el que hayan asistido; además los atletas deberán de tener que hacerse pruebas por lo menos una vez cada cuatro días para detectar algún caso positivo.
Además, todos los visitantes deberán presentar una prueba negativa cuando pisen suelo nipón, aunque la vacunación no será obligatoria, los atletas deberán de usar en todo momento cubrebocas, además de que no se le permitirá viajar en trasporte público, por seguridad.
Se les prohibirá a los atletas, árbitros y jueces no asistir a bares, restaurantes y lugares turísticos, solo se les permitirá viajar en trasporte oficial del comité internacional, los atletas que no estén siguiendo y acatando las órdenes serán acreedores a una sanción y deberán ser expulsados de la justa por incumplimiento de reglamento.
Este libro se dio a conocer luego de que se informara que los médicos que están atendiendo casos de COVID no podrán ser voluntarios en la justa olímpica; esto dicho por el director de la Asociación médica de Tokio, donde declaró que ya están con demasiada presión.
