Caitlin Clark llenó estadios en su etapa colegial y ahora como profesional, firmó un acuerdo de patrocinio con Nike por 28 millones de dólares e hizo que los ratings de televisión se dispararan.
Pero su salario en su primer año dentro de la WNBA es prácticamente un insulto en comparación con lo que perciben otras selecciones número uno del draft de otros deportes masculinos.
Víctor Wembanyama cobró 12 millones 160 mil dólares en su primera temporada con los Spurs de San Antonio de la NBA.
El pítcher Paul Skenes tiene un salario anual de 9 millones 760 mil 892 dólares con los Pirates de Pittsburgh de las Ligas Mayores.
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Y por si no fuera suficiente, el QB Caleb Williams llegó a un acuerdo por 7 millones 175 mil dólares anuales con los Bears de Chicago de la NFL.
La estrella del basquetbol colegial femenil y nueva integrante del Indiana Fever, cobrará solamente 76 mil dólares en su primera temporada al acordar por 4 años y 338 mil dólares con Indiana, es decir, Caitlin Clark no se acercará ni tantito al millón de dólares cuando acabe su primer contrato como profesional.
Fuente: The Athletic
