En el marco de unos Juegos Olímpicos suigéneris, el Comité Organizador de Tokio 2020 llevó a cabo la ceremonia de inauguración de la trigésimo segunda Olimpiada de la era moderna.
Aun y cuando no hubo público en las gradas del Nuevo Estadio Nacional de Japón, la ceremonia en donde se encendió el fuego olímpico trato de sorprender a los televidentes con un espectáculo pirotécnico y artístico de las costumbres y cultura japonesa.
El cual fue redondeado por el desfile de las delegaciones que participaran en Tokio 2020, y eh donde la golfista Gabriela López y el clavadista Rommel Pacheco fueron los atletas mexicanos encargados de portar la bandera de México.
Tras el desfile, el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach envió un mensaje en el que destacó que estos momentos son muy diferentes a lo que se esperaba, por lo que se invita a disfrutar de la unión que marcan los Juegos Olímpicos. Además de reconocer el trabajo de Japón por todas las complicaciones que tuvieron para que se pudieran celebrar los juegos.
Tras el mensaje del COI, se dio pie al encendido del pebetero olímpico, no sin antes con la presentación de los pictogramas de las disciplinas que se realizarán a lo largo de Tokio 2020, así como con una presentación de tecnología, musical y danza.
El encendido del pebetero
Tras una remembranza del origen del fuego olímpico y su paso por los cuatro puntos cardinales de Japón, al tiempo que este llegó al Estadio Nacional de Japón cobijado por las notas de ‘El bolero de Ravel’.
Al tiempo que la antorcha en forma de flor de cerezo fue llevada por Naomi Osaka a la cumbre de la recreación del Monte Fuji, que es la montaña japonesa más alta y símbolo nacional del país del sol naciente y que en esta ocasión dará vida al fuego olímpico.
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