El tenista serbio Novak Djokovic sigue bajo sospecha por mentir a las autoridades migratorias de Australia para disputar el primer Gran Slam del año.
Novak Djokovic se encuentra entrenando en Australia previo al primer GS del año en la ciudad de Melbourne, aunque en las últimas horas ha trascendido que aunque la raqueta número 1 del mundo puede estar en suelo australiano, sigue en curso una investigación respecto a sus declaraciones para ingresar a dicho país.
El diario inglés The Guardian ha ventilado este martes que según un informe de la fuerza fronteriza, «Nole» pudo mentir en sus declaración sobre que no hizo ningún viaje en las 2 últimas semanas, como también lo posteo en sus redes sociales, argumentando que pasó las fechas decembrinas en Belgrado. La realidad podría ser que antes de volar a Australia estaba en España desde el pasado 4 de enero.
Otro rotativo de prestigio en Europa, el Der Spiegel de Alemania ha publicado en las últimas que también hay inconsistencias en las pruebas PCR que presentó el serbio para obtener una visa por exención médica. Es decir, Djokovic presentó supuestas pruebas PCR que acreditaban que fue positivo a COVID-19 el 16 de diciembre sin embargo, los testeos digitales arrojaron lo contrario.
Otros grandes torneos como Roland Garros o el US Open han declarado abiertamente que Djokovic podrá participar con ellos sin el menor problema, pero en Australia, tanto la afición como el gobierno, están reticentes a dejarlo participar por los contantes giros que ha dado esta historia para tapar una mala conducta.