El pasado viernes, la Serie A fue escenario de un debut tan inusual como polémico. Durante el encuentro entre Cremonese y Sassuolo, hizo su primera aparición en la primera división italiana Romano Benito Floriani Mussolini, bisnieto de Benito Mussolini, el dictador que gobernó Italia durante la primera mitad del siglo XX.
El debut ocurrió al minuto 83, cuando el marcador estaba empatado 2-2. Con el nombre «Romano» en la espalda, el joven defensor ingresó al campo y fue determinante al provocar el penalti que selló el triunfo 3-2 para Cremonese.
Con 22 años, Romano Mussolini inició su carrera en las fuerzas básicas de la Roma, aunque desde 2016 ha pertenecido a la Lazio, club que aún posee su carta. A pesar de haber sido convocado al primer equipo en 2021, nunca logró debutar con los capitalinos. En la actualidad, se encuentra cedido al Cremonese.
“Felice di essere stato determinante” 🩶❤️
— U.S. Cremonese (@USCremonese) August 29, 2025
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Durante la temporada pasada, jugó con la Juve Stabia en la Serie B, donde acumuló 33 partidos, 1 gol y 3 asistencias, además de disputar tres encuentros en los playoffs de ascenso y uno más en la Coppa Italia.
Su apellido ha generado atención mediática constante. Romano es hijo de Alessandra Mussolini, ex diputada del Parlamento Europeo y nieta directa del dictador. Durante su etapa con Juve Stabia, su camiseta llevaba el nombre «F. Mussolini», una elección que, según ha dicho, no busca ocultar sus orígenes.
En una entrevista con La Gazzetta dello Sport, Romano declaró:
“Mi bisabuelo Benito fue una figura muy importante para Italia, pero estamos en 2024 y el mundo ha cambiado. Estas cosas vinculadas a mi apellido no me interesan. Siempre habrá algún prejuicio, pero mi trabajo no tiene nada que ver con eso y no me afecta”.
El debut de Romano Mussolini ya ha generado diversas reacciones en redes y medios, no tanto por su desempeño en el campo, sino por el inevitable peso histórico que carga su apellido.
