Lo que parecía imposible se convirtió en realidad en La Franja. Puebla consiguió su segunda victoria del Torneo Apertura 2025 al imponerse 4-3 a Tijuana, en un partido lleno de emociones, goles y drama hasta el último suspiro. Una noche para recordar en el Estadio Cuauhtémoc, donde la afición se llevó un espectáculo digno de guardar en la memoria.
El inicio fue complicado para los locales. Tijuana golpeó primero y rápido, con un penal convertido por Kevin Castañeda al minuto 51 tras una falta dentro del área sobre Gilberto Mora. La ventaja de la visita creció con goles de Castañeda y Mourad El Ghezouani, que pusieron el marcador 3-0 al 69’. La sensación era que el partido se iba del lado de los Xolos, y Puebla parecía incapaz de reaccionar.
Pero la garra poblana no tardó en aparecer. Ricardo Marin, primero, y Álvaro Burgos con el segundo, comenzaron la remontada desde el minuto 69, poniendo al equipo en posición de empatar y llenando de esperanza a la afición. El momento cumbre llegó en los últimos instantes: Carlos Baltazar apareció como héroe con dos goles entre el 82’ y el 94’, el último de ellos un remate magistral desde fuera del área junto al palo izquierdo, que desató la locura en las gradas.
El regreso de Gilberto Mora, tras brillar en el Mundial Sub-20 con México, fue otro de los focos del partido. Aunque no logró anotar ni asistir, su desempeño fue sobresaliente: pases precisos, recuperación de balón y presencia constante en el medio campo. Mora se mantiene como una de las piezas claves de Tijuana, y su reaparición promete dar mucho que hablar en lo que resta de la temporada.
Se vino de atrás y le dimos la vuelta. ¡ESTO ES PARA NUESTRA AFICIÓN QUE JAMÁS NOS DEJA SOLOS! 🤩🔥
— Club Puebla🎽 (@ClubPueblaMX) October 18, 2025
Partido de muchísimas emociones, no duden que este equipo lo dejará todo en los próximos partidos por ustedes 👊🏻#LaFranjaNosUne🎽 pic.twitter.com/ib5qVuiOPg
Puebla consigue así su segunda victoria del torneo, ambas en casa, consolidando un cierre de torneo con emociones a flor de piel. La Franja mostró corazón, resiliencia y la capacidad de no rendirse nunca, dejando claro que la ilusión por mantenerse en la pelea sigue viva.
Tijuana, por su parte, se queda con un sabor amargo. A pesar de haber llegado a poner el 0-2 en el marcador, no logró sostener la ventaja y perdió puntos valiosos, un recordatorio de que en la Liga MX nunca hay nada escrito hasta el último minuto.