El futbol en la Revolución Mexicana: de lo amateur a lo profesional

La Revolución Mexicana duró 7 largos años, dejando a su paso, muertes, crisis económica pero también democracia, libertad y oportunidades para las clase media y baja a lo largo y ancho del país. En el terreno del futbol, esa época también significó tiempos de cambio y evolución para generar un ámbito deportivo más organizado.

Los pasos del futbol amateur ya estaban dados desde 1902 con el primer torneo de la Liga Mexicana de Futbol Amateur, donde cinco equipos hicieron su aparición:  Orizaba Athletic Club, Pachuca Athletic Club, Reforma Athletic Club, México Cricket Club y British Club. Todos ellos fundados por ingleses y con jugadores de la misma nacionalidad.

En 1908 aparecieron los primeros jugadores mexicanos: David Islas y Jorge Gómez de Parada, el primero con el Pachuca y el segundo con el Reforma. Estos dos equipos y el British Club fueron los únicos que participaron en los campeonatos de 1910-11 y 1911-12.

Lo curioso sería que a medida que se acercaban los años de la revolución armada para tratar de despojar a los extranjeros de todos los privilegios amasados durante décadas, los primeros clubes con jugadores mexicanos veían la luz. Tal es el caso del Club Guadalajara en 1908 (franceses, belgas y mexicanos) y el Club México ya en 1910 netamente de futbolistas nacionales.

Ya con el inicio del conflicto armado y las continuas balaceras en el Distrito Federal, muchos ingleses optaron por abandonar el país, dejando el amateurismo con mayoría de jugadores mexicanos.

Durante esos 7 años de guerra interna, el futbol amateur increíblemente no dejó de crecer, ya que se fundaron varios clubes de mexicanos, apoyados por las colonias extranjeras.

Desde el Club México en 1910, formado por mexicanos y encabezados por Alfredo B. Cuellar, Jorge Gómez de Parada y Alberto Sierra, y luego otros promovidos por las colonias extranjeras: el Amicale française en 1911, el Rovers y el Real Club España en 1912, el Centro Deportivo Español en 1914, el Germania FV en 1915, el Cataluña en 1917.

Era complicado jugar la Liga Amateur en aquellos años, no sólo en lo futbolistico, sino también a la hora de jugarse la vida por las continuas balaceras.

El historiador deportivo Carlos Calderón contó alguna vez para Milenio como jugadores ponían en riesgo su vida en los traslados para jugar los partidos de visita:

“En alguna ocasión el Pachuca tenía que viajar en un camioncito de redilas, que consiguieron en la mina de Santa Gertrudis, para jugar contra el Reforma Athletic Club; solo cabían 10 jugadores, sacaron unas pajitas y Fred Williams perdió y tenía que buscar otro medio de transporte. Para no dejarlo solo, Alfred C. Crowle, líder y capitán, decide irse con él a caballo y en el trayecto son detenidos por zapatistas que pensaron que eran gringos…”

Carlos Calderón, historiador deportivo para Milenio, 2019

Bartolomé Vargas, portero del Pachuca en la época revolucionaria y luego gobernador de dicho estado más tarde (1929-1933) fue lo más cercano que estuvo la política del futbol en aquellos años. Fue hasta 1921 cuando se nota que estos dos ámbitos se buscan más con el torneo del Centenario de la Independencia en 1921, y Álvaro Obregón crea algunos eventos, entre ellos uno de futbol, el primer torneo nacional; anecdótico que llegan a la Final los dos equipos españoles, Asturias y España, que gana la Copa.

El futbol amateur vería más años en México, ya que de 1917, año en que el Congreso Constituyente proclama la Constitución el 5 de febrero, hasta 1943, año en que se juega el primer torneo profesional mexicano, tuvieron que pasar 26 años, donde el futbol figuró poco y nada.

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