Los Denver Broncos consiguieron un agónico triunfo, en los segundos finales del encuentro, ante los Buffalo Bills. Con una patada de gol de campo, Denver derrotó a Buffalo 24-22, consiguiendo así su cuarto triunfo de la campaña.
El partido, al cual Buffalo llegaba como favorito, fue de ida y vuelta con volteretas en el marcador. Con una buena actuación de Russell Wilson, los Broncos se fueron al descanso en ventaja de 15-8. Wilson, que no ha tenido muy buenos números desde que llegó a Denver, lanzó para 192 yardas y 2 pases de anotación.
Sin embargo, en la segunda mitad los Bills de Josh Allen despertaron. El talentoso quarterback no tuvo, sin embargo, el mejor de sus partidos. Lanzó para apenas 177 yardas y aunque completó un pase de anotación y tuvo un touchdown terrestre, tuvo 2 intercepciones.
El partido, aún así, llegó con ventaja de un punto para los Bills a los segundos finales. Sin embargo, los Broncos lograron acercarse lo suficiente para intentar un gol de campo de 36 yardas con sólo 4 segundos en el reloj.
La distancia era buena y el pateador, Wil Lutz, lo convirtió, dándole tres puntos a Denver que finalmente se llevó el triunfo. Con esto, se ponen a una victoria de tener un récord de .500 de efectividad en lo que va de la campaña.
¿QUÉ SIGUE PARA LOS BRONCOS?
Por ahora, los Denver Broncos aún tienen marca perdedora, pues han ganado 4 juegos y perdido 5. Sin embargo, su próximo encuentro ante los Browns de Cleveland podría hacer que suban en el Oeste de la Americana. En ese sentido, Denver hoy es el último lugar de esa división, pero una combinación de resultados podrían subirlos hasta el segundo puesto.
