La llegada de Roberto “Piojo” Alvarado al conjunto del Guadalajara ilusionó por un momento a la afición rojiblanca con el surgimiento de un proyecto renovado, pero conforme pasan los días, esos tragos de ilusión se agotan debido a las pocas noticias de nuevas incorporaciones al club. Con ello, las dudas crecen como la espuma y las respuestas llegan a cuenta gotas, sino es que éstas se niegan con rotundidad por la falta de compromiso para armar un equipo competitivo.
Marcelo Michel Leaño se vale más de las palabras frente a los medios de comunicación para dar validez a su proyecto que de lo hecho dentro del terreno de juego, ya que sus 24 puntos producto de 2 victorias, 3 derrotas y 3 empates en fase regular, además de la eliminación en repechaje contra el Puebla están lejos de conseguirle la credibilidad futbolística necesario fuera de los eufemismos emitidos en las conferencias de prensa.
La poca experiencia le pesa más que nunca al técnico de Chivas, pues su falta de personalidad y liderazgo le inhabilitan para exigir a la directiva conformada por Amaury Vergara y Ricardo Peláez una plantilla digna de un equipo grande, o al menos otras incorporaciones para aspirar a algo más que la media tabla.
Si bien, el “Piojo” Alvarado llega como un jugador consolidado en la Liga MX y con nivel de Selección Mexicana, en las circunstancias actuales del cuadro tapatío, cualquier cara nueva es un respiro, sobre todo si se toma en cuenta que se fueron jugadores que aportaban calidad al equipo; Alejandro Mayorga, un lateral con potencial importante y Uriel Antuna, que con más disciplina y calma, puede ser un fichaje a Europa.
Lejos están las llegadas de Alejandro Zendejas, canterano de Chivas y hoy goleador del Necaxa con quien sigue a préstamo; Marco Fabian, con brillante pasado en el equipo pero muy lejos por nivel futbolístico; o la de Eduardo “Mudo” Aguirre o Santiago Giménez, delanteros jóvenes y con talento pero lejos de una directiva que los ve con muchos problemas por dinero.
Las Chivas debutan en casa el domingo 9 de enero contra el Mazatlán FC en su propio estadio, con poco optimismo, pocos refuerzos y muy poca afluencia en la grada, eso sí, las dudas al por mayor y las grandes posibilidades de la media tabla.
