Muy poco ha mostrado el Guadalajara en este comienzo de torneo, me atrevería a decir que solo son destellos de buen futbol los que ha desplegado el Rebaño en estas dos jornadas, lo preocupante si queremos ver el vaso medio vacío es lo viene, pruebas que van a poner en jaque la realidad del equipo.
Lo mostrado en el juego ante León es una viva imagen que Chivas puede dar dos caras muy diferentes en tan solo 90 minutos, la cara del buen juego, del dinamismo de la alegría, por otra parte, la cara de echarse para atrás, esperar al rival, colgarse del marco, y además de quedarse con un hombre menos con justa razón.
Chivas si se vio perjudicado por el arbitraje, un gol que no sabemos la razón por al que lo anularon, mientras que también han dejado ver que no existe un liderazgo nato, en una pena máxima ningún jugador fue capaz de tomar el balón y cobrar con categoría.
Pero si uno que se quiso hacer el héroe y dijo, de aquí me cuelgo para ser el jugador del partido demostrar que la gente me quiere y de paso callar bocas, que equivocado estaba. Las Chivas de Cadena cada día se parecen más a las de Leaño, en las variantes de cambio, esto debe de preocupar.
Las alarmas aun están apagadas, sin embargo, en caso de no sacar los tres puntos contra Gallos esto puede estar cuesta arriba y sería nuevamente la crónica de una muerte anunciada, Cadena le tiene que poner aceite a su equipo, sangre, de verdad, no les cuesta nada jugar bien, agradar y ganar, si pueden, que lo hagan y las criticas se irán.
