Álvaro Fidalgo se ha convertido en un ídolo con las Águilas del América. Tricampeón de Liga MX, un Campeón de Campeones, una Supercopa MX y un Campeones Cup respaldan al mediocampista español en 184 partidos disputados como azulcrema.
El “Maguito” es, hoy en día, el mayor deseo para los aficionados de la Selección Mexicana. Pero al parecer, es a Fidalgo a quien no le pasa por la cabeza vestir los colores del Tri.
Tras recibir su carta de naturalización que lo acredita como mexicano en 2025, el mediocampista aún debe esperar un año más en el balompié mexicano, para cumplir los cinco años que estipula el reglamento para que un futbolista naturalizado pueda representar al país en el que juega.
Fidalgo podría ser considerado para la Selección Mexicana a principios de 2026 con miras de participar en la Copa del Mundo, pero al “10” del América no se le ve el mismo sueño que a la afición azteca. Es más, declinó que ya haya tenido contacto con el DT del Tri Javier Aguirre.
“Saludé al “Vasco” cuando llegó, le di la mano y lo saludé porque lo enfrenté contra Monterrey como el resto de mis compañeros. Siento decir que no hablé con el “Vasco”. La información que salió es totalmente mentira, lo siento, pero no es así”, señaló Fidalgo en la conferencia de prensa que ofreció América este martes en Coapa.
“No puedo pensar. Quedaría un año para el tema de la Selección. No es algo que pueda siquiera pensar, no lo sé, ya lo dije. Hay un seleccionador que no sé si en algún momento puede pensar en esa opción o no, nadie me dijo absolutamente nada, es un año para cumplir los tiempos, con el club me queda año y medio de contrato, no sé si voy a estar o no, no depende mí.”
Fidalgo prefiere enfocarse en el presente con América, pelear por el tetracampeonato y buscar uno de los títulos que se le ha negado al club en esta brillante Era: la CONCACAF Champions Cup.
“Sería hablar por hablar (tema Selección Mexicana), me gusta el presente, tenemos Concacaf, se vienen tres Clásicos seguidos y el sueño del tetracampeonato. Pensar en el futuro hoy no conviene para nadie”, concluyó.
