La gestión de Ricardo Peláez Linares al frente de Chivas ha llegado a su fin, el que fuera presidente deportivo Guadalajara ha dejado su cargo luego de tres años en los que no logró quedar campeón, donde prometió mucho, pero las imágenes religiosas no le ayudaron a lograr los objetivos.
La llegada de Ricardo a Chivas era esperanzadora por el antecedente que se tenía con los otros equipos donde logró campeonatos y tener una base sólida.
El proyecto era ambicioso, pero a su vez arriesgado, se derrocharon millones de dólares en una apuesta que no pasó más allá de semifinales. Peláez llega en 2019, con ideas renovadas, con una plantilla que prometía, pero también en donde se generó un circulo vicioso que hasta sus últimos días fue muy dañino.
Tres años en los que el ex delantero mexicano estuvo al frente en seis torneos, contando el Clausura 2020, entre liga y Copa no tuvo gran efectividad, debido a que no llegó ni al 50% en toda su gestión.
Al frente del equipo Ricardo presenció 108 juegos entre Liga y Copa, de los cuales se ganaron 38, se empataron 40 y se perdieron 30. El equipo tuvo 129 goles a favor y 116 en contra, teniendo una efectividad de 48%.
