Nashville logró sobrevivir al poderío del Inter de Miami y de Lionel Messi, y con un triunfo 2-1 en el Geodis Park mandó la serie de primera ronda de los playoffs de la MLS a un tercer y definitivo partido. El equipo de Callaghan aprovechó su localía y un inicio intenso para neutralizar a “Las Garzas”, que se quedaron cerca de empatar en el cierre gracias a su capitán argentino.
El encuentro comenzó con máxima tensión desde los primeros minutos. Al 7’, un error garrafal del arquero Rocco Ríos Novo le dio a Sam Surridge la oportunidad de provocar un penal. El delantero inglés no perdonó desde los once pasos y adelantó a los locales ante la sorpresa del visitante. A partir de ahí, Nashville se adueñó del ritmo del juego: presionó alto, cortó líneas de pase y complicó cualquier intento de salida de los de Javier Mascherano.
El dominio se transformó en contundencia justo antes del descanso. En un tiro de esquina al minuto 45, Hany Mukhtar cobró con maestría y Jack Bauer aprovechó dentro del área para empujar el 2-0. El estadio explotó, y el equipo amarillo se fue al vestidor con una ventaja que parecía sentenciar la noche.
En la segunda parte, Inter intentó reaccionar con los ingresos de Telasco Segovia y Silvetti, pero Nashville siguió siendo más ordenado. La defensa de Nashville contuvo los ataques de Luis Suárez, mientras Messi comenzaba a aparecer con más frecuencia, aunque sin espacios para marcar diferencia.
Los minutos finales fueron puro dramatismo. Messi sacó un zurdazo violento desde el lado derecho del área para el 2-1, un gol que revivió a los de Florida y mantuvo en suspenso los últimos segundos del encuentro.
WE AIN'T DONE YET
— Nashville SC (@NashvilleSC) November 2, 2025
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El marcador no se movió más, y tras el silbatazo final, Nashville celebró su hazaña: igualar la serie y obligar al tercer y último juego, donde se definirá quién avanza a la siguiente ronda de la Conferencia Este. Messi volvió a marcarle a Nashville, pero esta vez no fue suficiente.
