“Mantener un vicio, cuesta más que criar a dos hijos” así dice el refrán que hoy ha hecho que las viejas costumbres de Cruz Azul volvieron en este Clausura 2022.
Y es que a pesar de la sequía rota de 23 años, 5 meses y 23 días sin conseguir un título de Liga MX, Cruz Azul sigue dejando ir puntos en los minutos finales.
Esto comenzó en la jornada 3 cuando los cementeros tenían una ventaja de dos goles, un hombre de más desde el minuto 51, pero al 88′ todo se vino para abajo.
Santiago Giménez recibió una infantil tarjeta roja, Rayados se fue al frente en busca del resultado y lo consiguió, resultado final: empate a dos con goles en tiempo de compensación.
Jornada 5, en su casa y con su gente los dirigidos por Reynoso estaban arriba en el marcador desde el minuto 34, los empataron al 84′ y se pensaba que eso podía ser lo peor, pero no fue así.
Minuto 95, Rodrigo Aguirre anota el gol de la victoria y de nueva cuenta puntos que dejaron ir y peor aún, frente a un equipo que estrenaba técnico.
Y la más reciente, anoche frente a Santos con un Carlos Acevedo que pide a gritos su llamado a la selección nacional y una delantera celeste poco fina a la hora de definir.
Un penal fallado, recibieron gol en los primeros cinco minutos y perdieron al 94′, después de golear en cancha ajena la jornada pasada tienes estos resultados en casa.
Si los cementeros no hubieran dejado ir esos puntos, serían líderes de la Liga MX, pero el hubiera no existe dicen por ahí.
Tantos años de resultados similares que hasta un verbo inventaron: “cruzazulear”. Cruz Azul debe reaccionar por su bien y evitar repetir su historia.