Tomás Boy, el Jefe que no olvidaremos

Tomás Juan Boy Espinoza, un férreo mediocampista, que comenzó su carrera en la década de los 70 en el Atlético Español, posteriormente pasó a ser parte de Tigres, en donde hizo época, convirtiéndose en máximo goleador del equipo sin ser delantero.

Récord de más de 100 goles que duró hasta hace algunos años, que rompió André Pierre Gignac. El Jefe, uno de los máximos ídolos del cuadro de Tigres.

El futbol no le hizo justicia en su debido tiempo, ya que a pesar de que tuvo muchas oportunidades para ir al futbol de Europa nunca se pudo dar, de hecho, en el mundial de México 1986 varios clubes preguntaron por él, sin embargo, por su edad no pudo emigrar.

Una de las cosas por las que será muy recordad Tomas fue por aquel gol en juego amistoso entre México vs Polonia en la cancha del Estadio Corregidora. Boy presumió de ser el jugador que anotó el primer gol en este recinto el 5 de febrero de 1985.

Capitán de la selección mexicana, miembro del Salón de la Fama. Tomás Boy será recordado por los múltiples equipos que dirigió, pero desafortunadamente en ninguno quedó campeón, curiosamente nunca dirigió a Tigres, pero si a Monterrey.

Su último equipo fue Mazatlán FC. Como jugador quedó campeón en la década de los 70 y 80 con la camiseta de la UANL.

Su autoridad, categoría y liderazgo se ganó el mote del Jefe, mismo que le acompañó hasta los últimos días en las canchas. Solamente pudo jugar un mundial, aunque según él, pudo jugar uno o dos más.

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