James Harden regresó ayer al Toyota Center en la ciudad de Houston, lugar que por ocho temporadas fue su casa. Las cirtustancias al momento de sonar su nombre en la arena fueron diferentes pues la reacción de los fanáticos de los Rockets estuvo dividida.
Mientras algunos aficionados aclamaban a la “Barba” hubo otros que no lo perdonan aún y lanzando abucheos al MVP de la temporada 2018. Fue la primera vez que Harden enfrentó a los Rockets vistiendo la camiseta de los Brooklyn Nets.
“En cuanto a jugar en Houston, hubo muchas emociones encontradas para los fanáticos, pero sabía que eso iba a suceder. Sólo quería venir aquí y darles un espectáculo”
Harden tuvo una noche espectacular ante su ex equipo pues no solo fue la figura del partido al terminar con un triple-doble (29 puntos, 10 rebotes y 14 asistencias) sino también se convirtió en el sexto jugador en la historia de la NBA en lograr dicha cifra en el primer partido contra su ex equipo.
Fue la decimotercera derrota consecutiva de los Rockets, que estaban limitados a ocho jugadores disponibles, ya que la racha perdedora más larga de la franquicia en dos décadas se extendió hasta el receso del Juego de Estrellas.
