Hoy en día, las casas de apuestas son cada vez más comunes, y en el mercado hay muchas opciones de dónde elegir. En ese sentido, al haber tantas opciones, las casas de apuestas han optado por aplicar varias estrategias para que los usuarios se decidan por ellos.
Una de las más comunes es el denominado “bono de bienvenida”, el cual es una cantidad de dinero que la casa de apuestas “regala” a los nuevos usuarios. Este tipo de promociones ayudan al jugador a empezar a jugar sin necesidad de invertir dinero o hasta de tener ganancias en sus primeras apuestas.
Sin embargo, ahí es donde entra el término “rollover”, que es donde muchos usuarios suelen atorarse y no terminan de entender qué es lo que debe suceder para retirar sus ganancias. En términos generales, rollover es la cantidad de dinero total que tendrás que apostar con el bono de bienvenida en una casa de apuestas antes de solicitar un retiro.
Es decir, el rollover la cantidad de apuestas mínima que debe hacer el usuario antes de retirar ganancias provenientes de ese bono de bienvenida. Por poner un ejemplo, si el rollover es de 10, el usuario deberá hacer como mínimo 10 apuestas con el dinero del bono —las cuales deberán cumplir ciertos requisitos, como momios o hacerse en un determinado tiempo—, ganarlas y sólo entonces podrá retirar. Además, hay casas de apuestas que ponen un límite a la cantidad de dinero que el usuario puede retirar como producto de ganancias a partir del bono.
CUÁL SERÍA UN BUEN ROLLOVER
Cada casa de apuestas determina las condiciones de su rollover, por lo que no hay un número fijo para ello. Generalmente se considera un buen rollover cuando es de 5 o inferior. Es decir que cuanto más alto sea el rollover, será más complicado cumplir con la condición o más se tendrá que apostar para poder sacar el premio.
