Cerca de cumplir los cinco años sin un título de liga, el América tuvo una sequía más prolongada que logró romperse gracias a la hermandad que tenía en aquel entonces.
El campeonato del Verano 2002, el cual fue el noveno para las águilas, estuvo lleno de polémica por la forma en la que se consiguió y sobre todo, por el rival.
A inicios del milenio el América tenía 13 años sin levantar un título por lo que la presión estaba presente y necesitaban volver a dar la vuelta.
Fue entonces que la hermandad que tenía en aquel entonces con Necaxa lo liberó de esa presión para alzar por novena ocasión un título de liga.
La polémica generada con Necaxa
En esas fechas América y Necaxa le pertenecían al mismo dueño, situación que puso a dudar a muchos luego de que ambos llegaron a la final del Verano 2002.
En la ida los rayos se impusieron 2-0 (ambos partidos fueron en el Estadio Azteca) y las águilas necesitaban una remontada para ser campeones.
América forzó a los tiempos extra luego de empatar el marcador global y ahí, lograron coronarse con gol de oro convertido por Hugo Castillo.
Fue así como esta final estuvo empapada de polémica por los vínculos entre ambos clubes y el América por fin volvió a ser campeón del fútbol mexicano.