Diego Martín Cocca se convertirá en el nuevo entrenador de la Selección Mexicana, con argumentos, quizá, con experiencia en México de sobra, por compadrazgo, ni se diga, pero él será el capitán del barco tricolor rumbo al 2026.
Las formas cuentan, esta no ha sido una excepción, debido a que Diego se ha manejado muy mal para dar a conocer que es el nuevo estratega de la selección mexicana de futbol. Negociando a las espaldas de quien era su club (Tigres), cortando un proceso que apenas estaba comenzando.
Diego Martín no pudo terminar de peor forma su etapa con los felinos, lo único que ha logrado es ganarse el rencor de toda la afición de Tigres, mismos que aseguran que nunca debió de llegar. Cae más rápido un hablador que un cojo, el cojo se llama Diego.
Juró y perjuró que Tigres era su prioridad, pero como buen argentino, dejó la chamba votada, sin importar todo lo que le habían cumplido, todo el esfuerzo que el equipo tuvo que hacer para que tuviera una buena gestión.
No es la mejor opción, pero lo más triste es que todavía no lo presentan y nadie está conforme con su trabajo, que cierto es, el juego de la Selección no va a convencer ni tantito en los próximos 3 años.
Tigres ‘quemó’ a la Femexfut por anunciar antes de que el argentino será el entrenador de la Selección Mexicana, una gestión que está comenzando mal por las formas y que se espera por el bien de todas las partes que termine bien, porque de nada servirá dejar el trabajo que tenías garantizado por satisfacer las necesidades de tus ex jefes y después te despidan por no hacer tu trabajo.