La Selección de Brasil generó una conexión especial con la afición de Guadalajara durante las dos Copas del Mundo que se han disputado en México. Uno de los personajes más recordados de la edición de 1970 en tierras tapatías es, sin duda, Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como Pelé.
O’Rei ganó en aquella ocasión su tercera y última Copa del Mundo y, en el Estadio Jalisco, protagonizó una de las jugadas más icónicas que no terminaron en gol: su célebre amague al portero Mazurkiewicz en la semifinal ante Uruguay, una obra de arte sin balón que quedó para la historia.
En homenaje a su legado y a su conexión con Guadalajara, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, anunció hace unos meses la creación de una estatua de Pelé. Este proyecto fue recientemente confirmado por Victoria Montserrat Hidalgo, representante de la sede Guadalajara para el Mundial 2026.
La escultura tendrá una altura de 6.5 metros, a la que se sumará un pedestal para alcanzar un total de 9 metros. Estará ubicada a las afueras del Estadio Jalisco, en un espacio público renovado que incluirá bancas, internet gratuito y luminarias, pensado como un sitio emblemático y fotogénico para visitantes y aficionados.
“Será instalado en las inmediaciones del Estadio Jalisco para que esta escultura pueda tener un espacio público con bancas, internet gratuito y luminarias. Queremos que sea un lugar muy fotografiable”, detalló Montserrat Hidalgo.
Con esta obra, Guadalajara no solo rinde tributo al mejor futbolista de todos los tiempos, sino que también refuerza su papel protagónico en la historia de los Mundiales.
En 2026, la ciudad será sede por tercera vez de una Copa del Mundo y el Estadio Akron albergará cuatro partidos de la fase de grupos, incluyendo uno de la Selección Mexicana.
