
El Mundial sin estadios: Marruecos redefine el formato del Sub-17 Femenil 2025
El Mundial Femenil Sub-17 que se disputa en Marruecos ha roto con una de las tradiciones más arraigadas en el futbol: jugar en grandes estadios. Esta edición se está desarrollando en un formato inusual, donde el corazón del torneo no late entre tribunas repletas, sino en las canchas de una academia de élite.
La sede principal del certamen es la Academia de Futbol Mohammed VI, ubicada en Salé, una ciudad aledaña a Rabat. Este complejo, considerado uno de los centros de alto rendimiento más modernos de África, alberga la mayoría de los partidos de la fase de grupos. Los encuentros se disputan en sus canchas conocidas como Pitch 2 y Pitch 3, espacios diseñados para la formación y el desarrollo de talento, no para el espectáculo de gradas.
La decisión de la FIFA de utilizar este recinto como sede central refleja un cambio de enfoque: priorizar la infraestructura técnica y la calidad del terreno de juego por encima de la magnitud de los estadios. Es una apuesta por la esencia del futbol base, donde el rendimiento y la proyección de las jóvenes futbolistas pesan más que el escenario que las rodea.
That feeling when you make your first #U17WWC appearance. 🥹
— FIFA Women's World Cup (@FIFAWWC) October 20, 2025
Go, Samoa! 💪 pic.twitter.com/d7ORPbsO3L
Sin embargo, el torneo no renuncia del todo a la emoción de los grandes momentos. Los partidos más importantes —incluyendo el inaugural del 17 de octubre, las semifinales y la gran final del 8 de noviembre— se juegan en el Estadio Anexo del Complejo Deportivo Prince Moulay Abdellah, en Rabat. Con capacidad para poco más de 20 mil espectadores, este recinto acompaña el cierre de un Mundial que, por su formato y concepto, marca un precedente.
Mientras avanza la fase de grupos, Marruecos se convierte en ejemplo de cómo la organización deportiva puede reinventarse: un Mundial sin estadios, pero con una infraestructura de primer nivel, donde el desarrollo juvenil es el verdadero protagonista.