Las autoridades de Australia defienden a capa y espada las medidas adoptadas por los tenistas y entrenadores al llegar al país oceánico, aunque algunas participantes mostraron su inconformidad y aseguran el no haber asistido de saber con antelación la situación .
La incertidumbre de que se lleve a cabo el open de Australia, se debe a que después de que aterrizara el tercer avión con jugadores contagiados por COVID-19, aunado a los primeros casos, para sumar cuatro.
Los involucrados son los españoles Carlos Alcaraz y Mario Vilella, así como el entrenador Juan Carlos Ferrero, quienes permanecen confinados en un hotel en Melbourne.
” Lo que no entiendo es eso, nadie nos dijo nunca nada de que si una persona a borda resultaba positiva todo el avión debería someterse a cuarentena. Lo habría pensado mejor de haberlo sabido”, publicó en sus redes la tenista Putintseva, quien externó su descontento con los tenistas que dieron positivo.
Se espera que en los próximos días el circuito de un comunicado acerca de lo sucedido.
