Los contratos de los jugadores suelen tener ciertas peticiones y requerimientos que hacen más atractivo la posible firma del mismo, aunque no siempre son peticiones lógicas.
Estos son algunos de las cláusulas más bizarras en contratos de jugadores.
Lionel Messi tuvo una novela con el Barcelona antes de firmar por el PSG debido a la situación económica del club. Cuando discutían un nuevo contrato de extensión en 2020, una clausula le pedía a Messi aprender Catalán para ser una mejor imagen para el Barcelonismo. Messi no continuó en el Barca y tampoco aprendió el idioma.
Robert Lewandowski, además de ser un gran ariete, es un explorador de la vida de exteriores. Cuando seguía en el Borussia Dortmund este tenía pláticas con el Bayern Munich y Real Madrid, siendo estos últimos los que en el contrato prohibieron todo tipo de actividad “riesgosa” como escalar, andar en bicicleta y el hacer paracaidismo.
Rolf Christel Guie-Mien fue un jugador del Eicntrach Frankfurt que a su llegada al club exigió una sola condición. EL club tendría que pagar las clases de cocina de su esposa, de esa manera ella estaría conforme con el traspaso.
Keisuke Honda, quien tuvo un paso por el futbol mexicano, necesitó de un vehículo armado y blindado en su llegada a Botafogo, ya que la seguridad de la ciudad no es la ideal, y menos para un futbolista extranjero.
