Boca Juniors por fin está de vuelta en Buenos Aires, Argentina tras estár 12 horas en una comisaría de Belo Horizonte por los incidentes que se suscitaron en la vuelta de los octavos de final contra el Atlético Mineiro donde los jugadores Xeneizes hicieron disturbios y destrozos en el estadio de los brasileños a raíz de las decisiones arbitrales polémicas durante el encuentro.
Según el acta policial, la Justicia imputó a seis futbolistas, Cristian Pavón, Marcos Rojo, Diego González, Sebastián Villa, Carlos Zambrano y Norberto Briasco, como participantes en los enfrentamientos con agentes de seguridad y la Policía local.
Tras su regreso, el planel xeneize fue informado por el Ministerio de Salud del Gobierno Argentino que deberán permanecer aislados durante siete días luego de que considerará que rompieron la “burbuja sanitaria” al protagonizar los incidentes y permanecer en Brasil en contacto con otras personas.
Boca afirmó este miércoles a través de un comunicado que fue “perjudicado de forma alevosa” por el arbitraje y arremetió contra la CONMEBOL tras la eliminación por penales ante Atlético Mineiro en los octavos de final de la Copa Libertadores. “Nuestros socios, hinchas, jugadores y cuerpo técnico han sido perjudicados de forma alevosa, interpretando de manera maliciosa e intencionada la tecnología VAR”, dijo Boca en referencia a los dos goles anulados, uno en el partido de ida y otro en la vuelta.
Ante esto, el Atlético Mineiro también exigió una severa sanción para los jugadores de Boca y toda su delegación por los incidentes violentos que se presentaron en Belo Horizonte.
