El quarterback Ben Roethlisberger y los Pittsburgh Steelers podrían reunirse en los próximos días para definir el futuro del jugador, así como los términos de su contrato en caso de que decida continuar en la NFL.
Hace unos días el propietario de los Steelers, Art Rooney II, fue tajante en su conferencia de prensa anual, que en caso de que Roethlisberger decida regresar con el equipo el próximo año, no podrá hacerlo con su sueldo de 34 millones de dólares anuales, más bonos.
Por lo que, tanto el jugador como el equipo tendrán que trabajar en una reestructuración de contrato, con fecha límite hasta el 1 de junio, cuando los equipos tienen que presentar ante la NFL su plan de presupuestos y tope salarial de cara a la siguiente temporada.
“Creo que hemos sido francos con Ben al hacerle saber que no podríamos tenerlo de regreso bajo el contrato actual”. Señaló Rooney, quien reiteró que tendrán conversaciones internas entre el jugador y los dirigentes del equipo.
Por otro lado, el pasado 28 de enero el mismo Roethlisberger señaló para el medio “The Athletic”, que desea hacer todo lo que esté en sus manos para apoyar al equipo.
Pittsburgh podría ahorrar cerca de 14 millones de dólares en el tope salarial si convierten la mayoría del acuerdo con el quarterback en bonos. Esto para poder renovar el contrato de varios de sus compañeros.
