Como auténticos maestros de música clásica, los italianos compusieron un triunfo categórico de tres goles por cero en el estadio olímpico de Roma ante una Turquía que decepcionó en lo que fue el partido inaugural de la Eurocopa de Naciones.
La selección italiana lució renovada y poderosa, con un posesión de balón del 69% en todo el encuentro, un ataque fresco, con variantes en mitad de campo debido a una mezcla interesante entre juventud y veteranía, una defensa solida y una dirección pulcra desde el banco por Roberto Mancini
Inmobile, Insigne, Berardi y los vetaranos pero siempre confiables Chiellini y Bonucci comandaron la resurrección azzurri en Roma.
El Calcio italiano tocó el cielo
El futbol italiano tocó el punto más alto en poco menos de 30 años con la consecucion de la Copa del Mundo de Alemania 2006. Una selección italiana que se daba el lujo de contar con dos enganches llenos de magia como lo fueron Francesco Totti y Alessandro del Piero, un mariscal de campo en la figura de Andrea Pirlo, un potencial balón de oro en la defensa central bajo el nombre de Fabio Cannavaro y uno de los mejores arqueros de todos los tiempos, el mítico Gianluigi Buffon, todos comandados por el experimentado Marcelo Lippi.
Así, el balompié italiano fue fraguando una generación exitosa que tiempo después fue en declive, específicamente 11 años después, transitó del cielo al infierno.
Campeones del mundo pero no de Europa, no se puede ganar todo, muy normal
En el 2008, los italianos llegaban como campeones del mundo a la Euro de Austria y Suiza, sin embargo, cayeron en cuartos de final contra una España que sorprendía en los penales. Casillas y Buffon, la mejor postal de aquel partido. España posteriormente campeón y construyendo un camino histórico. Italia, campeón del mundo pero no de Europa, todo normal, no se puede ganar todo y menos de forma seguida.
Última generación respetable
En el 2012 se jugaba la Eurocopa de naciones jugada en Polonia y Ucrania fue testigo de la última generación respetable de Italia, pues a pesar de no ser favoritos, llegaron hasta la gran final donde sucumbieron ante el «tiki taka» de la selección española.
En ese grupo de jugadores aún había pesos pesados que fueron campeones del mundo en el 2006; Gianluigi Buffon, Andrea Pirlo, Antonio Cassano, y también jugadores jovenes en gran momento como Antonio di Natale, Ricardo Montolivo y el siempre polémico Mario Balotelli.
Su pico más alto fue en aquella semifinal donde despacharon a Alemania con doblete de «Super Mario» Balotelli. La final, otra historia muy distinta pero con el consuelo de una buena generación a futuro.
Inicia la debacle
El mundial de 2014 podía ser la oportunidad perfecta para demostrar que el subcampeonato europeo no fue casualidad, sin embargo, los jugadores no pensaron del mismo modo. Se fueron a casa en primera ronda con derrota ante Uruguay y una sorprendente Costa Rica, además de su única victoria contra Inglaterra.
En la Euro del 2016 en Francia, la Azzurra no pasó de cuartos de final (como ya se había hecho habitual), esta vez a manos de Alemania en tanda de penales.
El mundial de Rusia 2018 se veía con ilusión en el país de la bota, aunque la historia diría algo distinto. La selección de Suecia dejaba fuera a Italia, algo sorprendente pero también posible en la disputa de un repechaje. Italia dirigida por Cesare Prandelli no metían ni las manos y se suscitaba lo peor, sin boleto a la justa veraniega.
Los italianos no faltaban a una cita mundialista desde Suecia 1958, pero 60 años después ocurrió lo impensado, quedar fuera en instancia de repechaje. Con esto, leyendas de la selección fincaban su adiós y pasaban la estafeta en el peor escenario a una nueva generación, que por cierto, había que buscar, porque en la inmediatez, no se veía absolutamente nada bueno.
Roberto Mancini y un nuevo proyecto
Para dirigir a una selección que llevaba en las espaldas 4 títulos del mundo se tomaba la desición de nombrar a Roberto Mancini como gerarca del banquillo nacional. Roberto, tenía entre su palmarés haber dado al Manchester City el trofeo de la Premier League después de 44 años. En pocas palabras, los dirigentes italianos se decantaban por un experto en sacar brillo a lo ya ensombrecido.
El camino de Italia al mando de Mancini comenzó en la Nations League en la cual quedaron segundos solo por detrás de la que posteriormente sería la campeona, Portugal, la única selección que ha conseguido ganarles desde entonces.
Posteriormente llegó la clasificación a la Euro 2020, la cual pasó como líder de grupo para después hacer un debut soñado en la fase de grupos de la misma Euro con marcador de 3 por 0 ante Turquía.
Participó en la Nations League de 2020 y estará en la fase final en la primera fecha FIFA de la próxima temporada enfrentándose a España.
En cuento a la clasificación al Mundial 2022 ha ganado sus dos partidos y sin recibir gol.
Sin duda el dato más revelador del buen momento y gran proyecto italiano es la solidez defensiva como base de su juego, ese estilo que le dio cuatro mundiales y prestigio mundial; ya son 9 partidos (entre amistosos y oficiales) que no recibe gol, en total 810 minutos sin sacar el balón de la redes para Giggio Donnarumma.
