A los 44 minutos del México vs Uruguay, el partido cambió de tono. En una jugada que parecía rutinaria, Hirving Chucky Lozano aceleró por izquierda… y de inmediato algo no se sintió bien. El extremo del San Diego FC se tomó la parte posterior del muslo izquierdo, se dejó caer y, con ese simple gesto, encendió todas las alarmas: las del Tri, las del cuerpo técnico de Javier Aguirre y, sobre todo, las del club que lo espera para unas semifinales de conferencia que están a la vuelta de la esquina.
Lozano pidió el cambio sin dudar. Nada de aguantar, nada de hacer tiempo. Y eso siempre es señal de que la molestia fue real. Gilberto Mora, el juvenil que venía esperando una oportunidad, entró en su lugar mientras el estadio quedaba en silencio unos segundos intentando descifrar la gravedad del momento.
La preocupación, por el historial del Chucky, era natural. Pero dentro de todo, hubo un pequeño respiro: el atacante salió por su propio pie, sin renguear y con semblante sereno rumbo a la banca. Lo atendieron con más calma ahí mismo, mientras Aguirre reorganizaba al equipo y le abría la puerta a Mora para su prueba más seria con la selección.
⏱️45+1' Cambio de nuestro equipo.
— Selección Nacional (@miseleccionmx) November 16, 2025
Sale Hirving Lozano
Entra Gilberto Mora
🇲🇽 0-0 🇺🇾#SomosMéxico 💚🤍❤️
Hasta ahora no hay parte médico oficial. Lo único claro es lo que se vio en la cancha: Lozano llevó la mano al muslo izquierdo, señal evidente de un posible tirón. En las próximas horas se definirá si rompe concentración para volver a San Diego o si se queda con el grupo, aunque sea a modo de acompañamiento.
A menos de nueve días de un juego crucial en la MLS, este susto no pasa desapercibido. Chucky es figura, es referente y es pieza clave.
