San Francisco volvió a demostrar por qué su defensa sigue siendo un dolor de cabeza para cualquier rival. A pesar de no contar con Nick Bosa ni Fred Warner, los 49ers asfixiaron a Michael Penix Jr. durante todo el partido. Bryce Huff estuvo cerca de lograr un strip-sack en varias ocasiones, mientras que Tatum Bethune cubrió con firmeza el centro. Penix apenas podía mantenerse en pie, y Raheem Morris llegó a dudar si era momento de poner a Kirk Cousins. La defensa de San Francisco fue la verdadera protagonista y permitió que los 49ers se lleven un triunfo que los deja con récord de 5-2 en la temporada.
Pero si hubo un héroe en ofensiva, ese fue Christian McCaffrey. «CMC» lideró la carrera terrestre con 129 yardas y además brilló como receptor en momentos críticos. Su conversión en tercera y 13 acercó a San Francisco a la zona roja, y su touchdown final, tras un segundo esfuerzo implacable, sentenció la victoria. Aunque hubo algo de ayuda extra de un liniero, la persistencia de McCaffrey fue evidente y definió la diferencia en un duelo cerrado.
Para los Falcons, la ofensiva no encontró el ritmo. Una decisión cuestionable en cuarta oportunidad, con Michael Penix Jr. lanzando un pase que fue detenido por Chase Lucas, terminó por frenar sus esperanzas de igualar el marcador. La ausencia de Bijan Robinson en momentos clave también pasó factura, aunque el corredor sí respondió cuando Atlanta decidió incorporarlo en la última serie ofensiva.
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— San Francisco 49ers (@49ers) October 20, 2025
Mac Jones cumplió, pero dejó ver que todavía hay margen de mejora. Si bien repartió el balón entre varios receptores y mantuvo el control en varias series, algunas decisiones en momentos críticos fueron cuestionables. Aun así, su trabajo fue suficiente para mantener la ofensiva funcionando y capitalizar las oportunidades que le dio la defensa.
San Francisco controló el juego, combinando una defensa feroz con un ataque metódico y oportuno. La coordinación entre línea ofensiva y McCaffrey, sumada a la presión constante sobre Penix, fue la receta perfecta para el triunfo. Atlanta luchó, Bijan Robinson destacó, pero no fue suficiente para superar a un equipo que se muestra sólido en ambas fases del juego.
Con este resultado, los 49ers siguen consolidando su temporada y muestran que, incluso con bajas importantes, pueden imponerse gracias a la disciplina defensiva y a jugadores como McCaffrey que aparecen en los momentos que importan. Para los Falcons, el mensaje es claro: hay talento, pero todavía queda mucho por ajustar en las decisiones de juego si quieren competir en la NFC.